viernes, 7 de septiembre de 2007

Docentes, no docentes y alumnos impidieron que sesionara la Asamblea Universitaria

El de arriba podría ser el titular de cualquier página de cualquier diario que hace la crónica de como un grupo de inadaptados impide que el máximo órgano de gobierno de una Universidad Nacional sesione.

Pero también podría ser el titular que describe la situación de varias de las Asambleas Universitarias de la Universidad Nacional de San Luis. Sólo que nadie cortó el paso, el grupo que lo impidió no son inadaptados, patoteros, anarquistas, vagos, piqueteros de la académica, o del patoterismo sindical académico. Son mis colegas, alumnos y no docentes.

El Miércoles pasado con 25 asistentes 12 menos de los que se necesita para tener quórum y 44 menos de los que se necesitan para que todos estén presentes, nuevamente la Asamblea Universitaria de la UNSL, no pudo sesionar.

Quedan en el tintero la mitad de los temas propuestos, queda una semana para el cambio de autoridades.

El universitario promedio es una persona que acostumbra a legitimar absolutamente todo desde el poder que le confiere sentirse un intelectual. Por ejemplo alguien dice cosas como que - a la gente no le interesa hablar de estas cosas (lo que se discute en una asamblea). Dicho esto por un conjunto de personalidades de la académia, queda absolutamente justificado no asistir o no prestarle atención a ni más ni menos que una asamblea universitaria.

Lo que confunde el universitario o al menos lo que no quiere aceptar, es que además de estar inserto en un sistema meritocrático esta en un sistema que se precia o tiene reglas democráticas.

Son los mismos que critican al piquete. Los mismos que condenan el paro, los mismos que condenaron la toma. Son los mismos, afortunadamente no todos los que en una mezcla milagrosa de sabiondos y suicidas todavía enseñan dados, timba y la poesía cruel.

Antonio Mangione

lunes, 6 de agosto de 2007

Vergüenza propia

Vergüenza ajena es esa frase de dos palabras que ninguna palabra del diccionario reune en una sola. Es la vergüenza que nos provoca y que sentimos en nombre de todos por las acciones desprejuiciadas y que atentan con el criterio y el sentido común.

Vergüenza ajena me produce (ver foto) como los egresados de las Universidades, en este caso una Nacional, pública y gratuita, celebran que han rendido la última materia.

El rito iniciatico, incluye romper ropa (según sus defensores vieja y/o usada), bañar de diferentes fluidos inclusive fluidos corporales ajenos al festejante, tirarle yerba, huevos, harina, arroz o una mezcla de algunos o todos ellos al recién egresado. Por supuestom no ha faltado vino en el ritual o cerveza.

Los rituales o totems, forman parte de nuestra cultura, "la fiesta de quince de la nena" y antes, el debut con la prostituta del "machito de la casa". Existen otros con menos costos y más o menos pintorescos. Pero el totem de tirar comida es algo difícil de entender, de justificar, de tolerar. Es sencillamente indignante.

En repetidas ocasiones hemos podido ver como docenas de huevos se rompen y tiran sobre el cuerpo y al suelo alrededor de un recién egresado. Un kilo o mas de harina, arroz, polenta y otros comestibles. Me animo a preguntar ¿qué clase de idiotez sufre esta gente y los que los rodean? ¿Estará permitido y justificado tirar tres docenas de huevos una vez en la vida?

Si lo sé, es un golpe bajo, en el Chaco existe gente que pesa la mitad de lo que estipula la cartilla de peso para su edad, que va al almacén con 30 centavos a ver si puede comprar algo para comer. Y aquí nomas en San Luis, en una mesa de examen, se pueden tirar a la basura mas de 5 docenas de huevos, más de dos kilos de harina , más de un kilo de la preciada yerba, entre otros comestibles, decía y asi de rápido.

¿Queja o protesta?
Ni uno ni lo otro, denuncio lo morboso, atroz y feroz de tirar comida a la basura, de malgastar comestibles, de estupidez, de falta de consideración, de sentido común y sentido de justicia, de los egresados, sus padres, y sus amigos. Espectadores de show vergonzoso, que ya no da vergüenza ajena sino que comienza a ser más propia que nunca.

Propuestas
Las autoridades Universitarias, deberán pagar el costo político de no permitir que los chicos "se diviertan". La práctica debe ser ritualizada, tanta elite junta en la universidad servirá para que surjan propuestas creativas como, utilizar pigmentos diferentes al huevo, pintar con pinturas lavables, utilizar las hojas de la cursada y reciclarlas en papel picado en pasta de celulosa o lo que se les ocurra. Sería interesante recargar un punitorio en el título a los que sigan tirando comida y por supuesto ensuciando la vía publica. Sería interesante premiar a quienes hagan propuestas creativas y amigables con el medio ambiente. Igualmente de interés sería tener un espacio disponible a los efectos, o si se hace en la vía pública, disponer de plásticos o lonas.

Disculpen si esto arruina la fiesta, si mi discurso es retrógrado, pero no puedo evitar sentir vergüenza, mucha vergüenza, mucha vergüenza.

Antonio Mangione






miércoles, 1 de agosto de 2007

La Investigación, la ley, el discurso...

Hace tiempo atrás, quien suscribe solicitó al Consejo Superior mediante Actuac. Nº 577/07-M se informara sobre quien/quienes son los responsables legales del incumplimiento del Artículo 37 del Estatuto Universitario en su inciso b), el cual obliga a que en los expedientes de una reválida del cargo, se incluya la opinión fundada de los alumnos. Dicha nota tuvo tratamiento en el Consejo Superior y girada a la Dirección General de Asesoría Jurídica de la Universidad solicitándole que investigue sobre el tema.

Dicha dirección dice en su despacho ¨Que con referencia a lo requerido por el Consejo Superior cabe señalar que la intervención del suscripto en el trámite administrativo se realiza en el marco del Artículo 7º inciso d) de la Ley 10549, y sus Decretos Reglamentarios 1759/72 y 1883/91, texto ordenado, y que por ende se carece de facultades de investigación, por ello no puedo responder sobre las afirmaciones que hace el presentante y el propio Consejo (se refeire al Consejo Superior) con relación a ¨los responsables legales del incumplimiento del Artículo 37 del Estatuto Universitario en su inciso b)¨, como así tampoco y resultaría una temeridad de mi parte afirmar que los supuestos e hipotéticos incumplidores del Estatuto encuadren en la figura de incumplimiento de deberes de funcionario público (como quien suscribe preguntaba en dicha Actuación). Por otra parte y con relación al último párrafo de fs. 1, y sobre la desconsiderada exigencia al Consejo Superior, deberá expedirse el Cuerpo¨. Palabra más o menos dice, no estoy en condiciones de investigar por que me lo impide la ley, lo cual es cierto.

Sin embargo las preguntas que dan origen a todo esto todavía no han sido contestadas. ¿Quienes son responsables del incumplimiento de un artículo de un Estatuto? y si encuadra o no en la figura de incumplimiento de deberes de funcionario público.

Repsasemos, cuando se incumple, se solicita se investigue, el que tiene atribuciones de hacerlo es o el Rector o los Decanos (cada uno en su Facultad), es una obligacion que tienen. Sin embargo ninguno de los Decanos del Suiperior y su Rector se preocuparon por inisiar una investigación sobre el tema, es decir sobre el incumplimiento de un artículo del Estatuto. En vez el Consejo Superior, le pide con algo de al menos torpeza, la Dirección General de Asesoría Jurídica que "investigue".

Según el Estatuto, el reglamento interno del Consejo Superior, y de muchos sino todos los reglamentos internos de los Consejos Directivos, está muy claro quien debe investigar o mandar a investigar. Hasta la fecha no se hizo.

Asi, el discurso sobre la ley, el cumplimiento de la norma, lo apegado a la razón y al orden que muchas de nuestras autoridades invocan y proponen todos tengamos, se escurre rápidmente como la arena entre las manos.

Un muy mal ejemplo para la comunidad universitaria y la no universitaria que en su gran mayoría nos paga el sueldo y confía en que en una casa de altos estudios, donde se concentra la elite pensante de la sociedad, la ley se cumple a rajatabla, se investiga hasta las últimas consecuencias cualquier incumplimiento y en donde el apego a la norma es lo que respalda a la palabra.

Antonio Mangione

miércoles, 11 de abril de 2007

Lo público y lo privado

por Antonio Mangione y Guillermo Reta

Con fecha 29 de Junio del 2005 quienes suscriben, enviamos al Consejo Directivo de la Facultad de Química, Bioquímica y Farmacia, el proyecto de ordenanza que se adjunta, en donde se propone que las encuestas estudiantiles, específicamente las Encuestas de Opinión Estudiantil enmarcadas en el Programa de Autoevaluación Institucional para el Mejoramiento de la Calidad (PAIMEC), tuvieran carácter de públicas (ver en los considerandos y el articulado, las justificaciones).
El Consejo Directivo de la Facultad de QByF, entendió que se contraponía con una ordenanza rectoral, que reglamenta dicha encuesta, y si bien mostraba cierta conformidad con la propuesta, no quería, como corresponde, contravenir una Ordenanza de orden jerárquico mayor, por lo cual la elevó al Consejo Superior de la Universidad. El Consejo Superior recientemente se encuentra abocado a la discusión de dicho tema, hasta ahora el despacho de la Comisión Asesora de Asuntos Académicos del Consejo Superior, aconseja al cuerpo no hacer lugar a lo pedido, en palabras de la Lic. Mainero, "por que no fueron hechas para eso", es decir para que sea pública. Aunque la misma docente aclara que le gustaría recibir la opinión de todas las Facultades y de sus docentes. Es decir se propone, aunque el debate no esta agotado (la próxima reunión del Superior sería dentro de exactamente 15 días), que este tema vuelva a ser considerado por todos los docentes de la universidad. Es al menos curioso, en las instancias que se propone la participación directa de los docentes para algunos temas y en otros el Consejo Superior propone tomar sus decisiones sin consultarlos. Es curioso pero no sorprendente, esta es la típica metodología utilizada cuando se sabe que las decisiones que se tomen pueden afectar a la mayoría de sus colegas, que podrían condenarlos al enojo eterno o a un retiro del apoyo. No descartamos por supuesto que sea sólo un acto de bondad y apertura del cuerpo colegiado o algunos de sus integrantes para dar mayor participación a los representados. El problema es mayor, al día de la fecha los estudiantes no conocen el desempeño (medido por esta encuesta) de los docentes que tendrán en años venideros, entre otras desventajas que tiene emitir una opinión y no saber que repercusión tuvo. ¿Por qué decimos esto?, porque en el artículo 37 de nuestro actual Estatuto Universitario, dice textualmente (ver remarcado en negritras) "… El Consejo Superior facultará a los Consejos Directivos para que los mismos, a través de Comisiones Asesoras y en forma inexcusable, bi o trianualmente evalúen el correcto desempeño de cada docente en sus funciones de docencia, investigación, formación de recursos humanos, perfeccionamiento, extensión universitaria y gobierno. Para ello tendrá en cuenta: a) El cumplimiento de un plan de actividades previamente aprobado por la Facultad respectiva. b) Opinión fundada del claustro de Alumnos. c) Opinión fundada del Área en la cual actúa el docente. d) Opinión fundada de evaluadores externos para el caso de profesores. La Facultad podrá, cada 6 años, asignar a la evaluación correspondiente las características de una prueba de reválida, similar a un concurso, la cual tendrá como elementos de juicio los resultados de las evaluaciones anteriores a la misma. Si éste es el caso, podrá prescindirse del requisito del punto d) para las evaluaciones periódicas. El cargo quedará vacante en caso de producirse dos evaluaciones insatisfactorias seguidas o alternadas, o si una prueba de reválida resultará insatisfactoria. El Consejo Superior actuará como instancia de apelación del resultado de las evaluaciones. El Consejo Superior reglamentará los casos y la modalidad en que corresponda el abono de indemnización al docente que cese en su cargo." Nótese de la obligatoriedad de realizar las evaluaciones bi o trianuales y además nótese que para cualquiera de las dos evaluaciones, la primera mencionada y las de reválida se requiere de la Opinión fundada del claustro de Alumnos. La primera pregunta que hacemos tiene una respuesta. ¿Se han estado tomando reválidas sin la Opinión fundada del claustro de Alumnos? Respuesta: SI. ¿Es anti estatutario? Respuesta: SI ¿Existe algún responsable? Respuesta: No se sabe. ¿Qué tienen que ver los motivos de hacer una encuesta de estudiantes pública con el flagrante incumplimiento del Estatuto? Es evidente que las autoridades le asignan un valor declamativo a las encuestas, castigan al alumno que no las llena, pero ningún alumno se entera cómo fue evaluado el docente, o los docentes de años venideros o del curso recién tomado. La misma evaluación además es tenida en cuenta (a veces) por un jurado a la hora de evaluar el desempeño docente en su cargo y su reválida. Pero es algo secreto y cerrado. Cómo crecer, cuando no existe acceso a la información, ¿por qué el presupuesto de la Nación o el de la Universidad son de acceso público y la opinión de los estudiantes no? ¿Por qué las clases, sesiones de consejos, exámenes, y toda otra actividad dentro de la Universidad son públicas y las Encuestas no? El tema no lo vamos a agotar nosotros, la encuesta de alumnos tiene varios problemas y ribetes, pero parece que estos problemas no han sido impedimento para seguirla tomando y exigiendo a los alumnos sopena de castigo si no lo hacen. Pero paradójicamente se la considera como incompletas y con problemas cuando se trata de hacerlas públicas y que todo el mundo sepa como fue evaluado un empleado pagado con fondos públicos. Muchos de mis colegas piensan que lo que hacen los alumnos no es opinar fundadamente, o quieren que no sea anónimo el llenado y que el docente tenga acceso al nombre de los estudiantes o que no tendría validez hasta que la foto del profesor no esté disponible para el alumno por que a veces no saben la encuesta de cuál profesor están llenando. Todos estos temas son de fácil solución. Podemos asegurarles a ustedes que aun con todas estas "garantías" un nutrido grupo de docentes estaría en contra de hacer públicas dichas encuestas de los estudiantes. Las encuestas podrían no ser obligatorias, los nombres podrían ser revelados en caso que exista una injuria o alguna figura legal que se encuadre en algún perjuicio civil o laboral para el docente. Sin embargo, se está perdiendo de vista algo, esta encuesta se consideró útil por que contribuiría al mejoramiento de la enseñanza. No hacerlas públicas no mejora en nada la situación, por cuanto no es transparente y honestos con los alumnos. Ni hablar que en algún momento uno podría estar compitiendo por un cargo con un docente con verdaderas opiniones desfavorables y uno por supuesto no estaría enterado con anticipación al concurso. El no hacer de las encuestas una herramienta de uso público no sólo no aprovecha al máximo todas las ventajas que podríamos extraer de ellas sino que también cubre con un manto de sombras y sospechas la función docente en la Universidad. Sólo escondemos lo que nos da vergüenza mostrar, o lo que no queremos que otros sepan. Con respecto a las encuestas... ¿Por qué no querer hacerlas públicas? ¿Acaso no queremos que la comunidad conozca que tan bien hacemos el trabajo que la misma comunidad nos remunera? Por ahí estamos olvidando que como docentes universitarios tenemos el deber de rendir cuentas sobre nuestras actividades dentro y fuera de la Universidad. Mientras tanto, los alumnos las llenan, nosotros las recibimos, los archivos se llenan de papeles no utilizados, los alumnos no saben por qué están haciendo lo que les están exigiendo, cuando la responsabilidad debiera ser ejercitada por quien dictamina Así, el Propósito Institucional 11 de la Universidad Nacional de San Luis, que dice "Que es necesario involucrar también y en forma directa a los alumnos en la revisión crítica orientada a crear y afianzar el conjunto de condiciones que se estiman necesarias para la concreción de los propósitos que definen las funciones específicas de la UNSL.", se estaría menoscabando por cuanto no existe otra forma (además de la nota particular que podría presentar un alumno a las autoridades) que la encuesta para dar cumplimiento a este propósito. Queda excluido por supuesto que el alumno cumpla en tener un rendimiento mínimo esperado en calidad de tal. Una constante cultura del desentendimiento, el trabajo corporativo y el flagrante incumplimiento del Estatuto, opaca el brillo que de a ratos destella una universidad de dimensiones y características ideales para el crecimiento académico y científico. Antonio Mangione y Guillermo Reta PROPUESTA DE ORDENANZA VISTO: El aporte que realizan los alumnos para el mejoramiento de la calidad educativa, a través de las Encuestas de Opinión Estudiantil enmarcadas en el Programa de Autoevaluación Institucional para el Mejoramiento de la Calidad (PAIMEC). CONSIDERANDO: La Utilidad Institucional de la información volcada por el claustro alumnos en las EOE. La necesidad de socializar el resultado de las Encuestas de Opinión Estudiantil con el fin de propiciar una verdadera transparencia en la función docente de la FQByF. Que la opinión de los alumnos sobre la actividad docente es de la Comunidad Universitaria en su conjunto. Que es necesario involucrar también y en forma directa a los alumnos en la revisión crítica orientada a crear y afianzar el conjunto de condiciones que se estiman necesarias para la concreción de los propósitos que definen las funciones específicas de la UNSL. (Propósito Institucional N 11) Que un sistema integrado de información tal cual se propone en el propósito 12, requiere además que el acceso para su visualización, comprensión y análisis sea amplio, abierto e irrestricto. Que además esto favorecería un mejor funcionamiento de las carreras de la UNSL. Que sólo el ejercicio responsable de derechos y obligaciones conduce a una reflexión y toma de responsabilidad sobre los actos se llevan a cabo. Que es necesario estimular la participación de auto evaluación de todos los actores principales alumnos, docentes y no docentes El Honorable Consejo Directivo de la Facultad de Química, Bioquímica y Farmacia ORDENA: Artículo 1: Publicar cuatrimestralmente y de forma electrónica en la página web de la Facultad el resultado de las Encuestas de Opinión Estudiantil de la Facultad de Química, Bioquímica y Farmacia con acceso libre para todos los miembros de la Comunidad Universitaria. Artículo 2: Dicha información será publicada 25 días hábiles después que la misma haya sido entregada a los docentes. Artículo 3: Todo docente puede solicitar al Consejo Directivo la no publicación del resultado de sus encuestas. La solicitud se hará por nota dirigida al Decano y por su intermedio al Honorable Consejo Directivo, por mesa de entrada y deberá contar con la debida justificación del pedido y el aval del área correspondiente. El plazo para la presentación es de 5 días hábiles. Artículo 4: Establecer, en la página de ingreso a la información de las Encuestas de Opinión Estudiantil, un foro electrónico en el cual se puedan volcar opiniones sobre todos los temas relacionados con la EOE. Dicho foro será limitado para miembros de la Comunidad Universitaria y serán publicadas solamente las opiniones que cuenten con la dirección de e-mail (UNSL) del participante del foro. Artículo 5: Difundir en el ámbito de la Facultad que la información referida a las Encuestas de Opinión Estudiantil se encuentra disponible y la manera de acceder a ella.

jueves, 22 de marzo de 2007

¿Y...donde están los candidatos?

La situación general de debilidad institucional, falta de reflejos de su dirigencia y una marcada abulia de los actores de la democracia universitaria, en particular el sector docente, permiten predecir un escenario disímil, agitado y preocupante.

La situación de las Facultades, su gente o sus actuales Decanos que ya han encontrado herederos al Decanato y las que todavía no saben para donde ir o los potenciales candidatos que directamente ya se han negado a participar de una elección, evidencian otra vez, el desgaste al que están sometidas no sólo las autoridades actuales sino la comunidad en general.

Una política de mensaje cerrado y puertas para adentro, el descreimiento absoluto de los representados en los cuerpos colegiados alimentado por, en muchos casos los mismos cuerpos, pero principalmente como resultado directo del personalismo atroz de las autoridades unipersonales, están provocando el hermetismo de la comunidad universitaria. Una actitud de
“sálvese quien pueda” impera y el conjunto de individualidades y egoísmo lo único que hará es profundizar la crisis.


Habiéndose desdibujado casi por completo el perfil académico de la universidad más allá de esfuerzos individuales, de sus carreras y su acreditación, inclusive más allá del perfil académico de primer nivel de algunos de sus investigadores, el camino transitado y por transitar de la democracia en la Universidad parece sólo una batalla mezquina por protagonismo y poder.

De la excelencia sólo queda su invocación y de los propósitos institucionales un listado de buenas intenciones.

Esperemos no encontrarnos con avisos como el de la imagen.


Antonio Mangione

miércoles, 14 de marzo de 2007

Inauguramos en la UNSL un nuevo y lamentable estilo de gestión de recursos monetarios.

Más que poco elegante me parece lamentable la aceptación sobre tablas en el consejo superior de tratar y conceder $250.000 para una facultad a cuenta del futuro presupuesto de la UNSL del año 2008, sin tratamiento de la Comisión de Presupuesto y Cuentas y en la primera sesión del año 2007 (el 6/3/07).

En 5 años y medio de consejero superior no he visto algo semejante, y creo que no se ha dado nunca. Los presupuestos anuales se deciden los últimos días de diciembre del año anterior, por que se argumenta que recién a esa altura del año es posible tener el monto que recibirá la UNSL y en general los decanos de las 4 facultades de la UNSL suelen reunirse para evaluar y compatibilizar las necesidades del año siguiente.


El presupuesto 2007 aprobado el 27/12/06 destinó $200.000 para acreditación de carreras, de los que la FICES recibirá $150.000 y la Facultad de Química, Bioquímica y Farmacia $50.000. El aprobar $250.000 para una unidad académica implica que en 2008 deberá destinarse bastante más a ese rubro para poder compatibilizar pedidos similares de otras facultades. Que otro rubro se verá disminuido por este aumento? Que dirán los consejeros que aprobaron este pedido sobre tablas a otros pedidos de otras facultades? Quedará algo de dinero para que el nuevo consejo superior que surja de las próximas elecciones pueda distribuir en el presupuesto 2008?


Yo mocioné que el lunes 12/3/07 el pedido fuera tratado por la Comisión de Presupuesto y Cuentas y el martes 13/3/07 el CS decidiera, antes del 15/3/07 como lo solicitó la Decana de la Facultad de Química, Bioquímica y Farmacia. Mi moción no tuvo mayoría. Los que se animaron a dar argumentos dijeron que quizás la Comisión de Presupuesto y Cuentas no tendría quorum el lunes 12 (!). Yo opino que temieron que se presentaran otros pedidos igualmente importantes que debían ser compatibilizados como se hizo siempre.


Estoy de acuerdo que hay que planificar a futuro en una universidad, y que esa planificación debe priorizar la acreditación de carreras. Pero una planificación a futuro se hace con un estudio responsable que considere las situaciones de todas las unidades académicas y las posibilidades presupuestarias de toda la UNSL, no sobre tablas y a las apuradas.


Miguel De Bortoli
Consejero Superior por la Facultad de Ciencias Humanas
Universidad Nacional de San Luis

martes, 13 de marzo de 2007

El argumento falaz

Falaz significa según el diccionario de la Real Academia Española, (Del lat. fallax, -ācis), 1. adj. Embustero, falso y 2. adj. Que halaga y atrae con falsas apariencias. Falaz mansedumbre. Falaces obsequios. A los fines de respetar posturas, no endilgando malas intensiones y para guardar la elegancia y estilo, que intentaré mantener en este escrito me quedaré con la definición numero 2.

Falaz ha sido la línea argumental de los opositores al voto de los llamados “docentes interinos”. El Dr. Eduardo Borkowski uno de los opositores a la propuesta de otorgar el voto a los “docentes interinos”, hace hincapié sobre que la diferencia entre un docente interino y un efectivo, son los requisitos que se requieren para concursar el cargo (no las responsabilidades una vez obtenido el cargo, que son exactamente las mismas), y el carácter temporario del cargo interino.

Argumenta que un profesor efectivo es estable. Lo cual jurídica y normativamente par ala Universidad no lo es. Se olvidan quienes defienden esta postura que un profesor efectivo, podría perder la reválida de su cargo. Deben dar por supuesto que los docentes efectivos no pierden reválidas. Pero no sólo eso además, se corre el riesgo que la reválida sea sólo un trámite para extender la permanencia de un efectivo por otros seis años. En ese caso la preocupación del Borkowski debería centrarse en los tiempos de permanencia y no en el carácter. Por esto su argumento es falaz


Recientemente mi colega y asambleísta de la Universidad Nacional de San Luis, rescata y remarca el número de requisitos adicionales para ser efectivo, como por ejemplo ser doctor o tener formación equivalente demostrable, entiendo se refiere a alguna cargo de profesor. Este es otro argumento falaz, por que de haberse consensuado que para ser efectivo en un cargo de profesor se requería ser categoría I en incentivos, Investigador Principal de CONICET, entonces él y otros no podríamos ni siquiera habernos inscripto al concurso. Vaya, ahora comienza a desdibujarse un argumento, que si no es falaz, es al menos endeble.

Pero esto continúa, por que otro de los requisitos es que para un cargo de profesor efectivo, en su concurso debe haber al menos dos docentes efectivos de fuera de la institución, pero para los auxiliares esto no es un requisito. Vale decir que los auxiliares son menos efectivos que los profesores. A este punto pienso que nuestra reglamentación adolece de patetismo.

Otro colega el Dr. Horas, dice que el cargo de un interino es el más vulnerable por que depende para su redesignación de gente como el Coordinador de Área o de Departamento o de sus colegas. Bueno eso es simplemente por que lo hemos querido asi. En realidad la permanencia de esta persona en su cargo debiera ser por un periodo no superior a los dos años y no inferior a los dos años y estar sólo en manos del Consejo Directivo renovar o no en casos excepcionales, por ejemplo mientras se sustancie el concurso efectivo. Es decir armamos argumentos sobre la normativa y no sobre el principio de justicia y derecho. Falaz.


A esta altura debo decir que en lo particular, no estoy de acuerdo con que siquiera existan interinos en la Universidad. No entiendo que es lo que hay que ponerle a prueba a un docente investigador. Pero si lo vana poner a prueba hagamos como hacen otras instituciones del mundo, que no le dan al docente investigador 1 o 2 años para demostrar algo, le dan cuatro o 5 años. Aunque los dos procesos de selección y concurso en esos países son despiadadamente exigentes. Tal vez no queramos entrar en ese campo. Es entendible.

Las UUNN, se manejan con un sistema mixto de docencia e investigación. Alguna vez allá lejos y hace tiempo se cuenta como un mito universitario que el anterior Rector Alberto Puchmuller, al ser peguntado por los prestamistas de BID, sobre cuantos investigadores teníamos en la universidad, contestó – mil – La sorpresa del funcionario del BID, fue grande. ¿Tenemos mil investigadores en la universidad? ¿Tenemos mil quinientos hoy?

Este sistema mixto, no tienen claro el valor dado a la docencia, ni a la investigación. No sabe que es un Auxiliar de Primera, si alguien que se inicia en la docencia o un sueldo de contraparte de una beca, para hacer el trabajo de investigación del profesor titular.

Mientras el profesor Adjunto juega o intenta ser profesor efectivo, le dejan a cargo estudiantes, la planificación de tareas, puede dirigir proyectos y en estos puntos, ni Jorge Horas ni Borkowski, ni nadie levantó un dedo para hacer un planteamiento al respecto. Otra vez, para votar no pero para dirigir recursos humanos si, para que CONICET acepte que alguien interino dirija becas doctorales si, pero para votar ¿no? Falaz.

Ahora los opositores a la propuesta ya tratada en Asamblea Universitaria, aunque todavía le queda una posibilidad de pedido de reconsideración, para que voten los llamados “interinos”, comienzan a hablar de “una minoría de interinos”. Que oportuno el uso del termino minoría.

Quiero refrescar la memoria de aquellos que han estado involucrados en este tipo de discusiones, que se ha acusado sin pruebas a los redactores de la propuesta y a quienes de alguna manera la hemos defendido, de perseguir fines electorales.

Que fines persigue alguien que ahora se aboca a repetir que se trata de una minoría de interinos. Pretende desanimar?, pretende llevar calma? ¿o los derechos se cumplen, se revisan, se velan dependiendo del número de involucrados?

Me encuentro lejos en intensiones de agotar la discusión aquí, de dar mi opinión como la única y verdadera. Simplemente invito a simpatizantes y no simpatizantes a esgrimir argumentos con pruebas, al lógica de la retórica, es lógica de la retórica, tiene sentido cuando se dice, pero los hechos requieren de pruebas.

Dar un tema tan complejo, de arrastre histórico y político como este, como sencillo y resuelto simplemente por el consenso del establishment anterior, es un argumento falaz. Los opositores a la propuesta del voto de los docentes “interinos” ya han probado de su propia medicina cuando en la Asamblea Universitaria con argumentos falaces pero peor aún, infantiles, se decidió que el sistema de reelección de autoridades unipersonales de la Universidad Nacionalde San Luis se mantenga como hasta ahora.

Nos esperan tiempos difíciles, donde será necesario saber decir no, pensar y reflexionar sobre hechos y palabras y no sobre quienes las dice, evitando por todos los medios halagarnos y atraernos con falsas apariencias y no caer en una “Falaz mansedumbre”

Antonio Mangione